El significado de la maternidad

Aunque todas sabemos que la maternidad es el hecho biológico de ser madre, el instinto maternal se desarrolla en algunas mujeres incluso antes de tener a su primer bebé. Pero entonces ¿qué es la maternidad?

Es una vivencia y una experiencia muy íntima que cada mujer vive de una manera totalmente diferente, ya que se trata de un conjunto de emociones personales relacionadas con el amor y la protección.

El significado de maternidad

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Generalmente, el concepto de maternidad está asociado al vínculo que tenemos las mujeres con nuestro bebé, pero en realidad, va mucho más allá porque es una experiencia vital mucho más amplia, que marca un antes y un después y que es para toda la vida, independientemente de la edad que tenga tu hijo.

La maternidad es un aprendizaje que ninguna mujer descubre hasta que vive en primera persona esa etapa. Una nueva aventura en la que normalmente las prioridades cambian, tu ritmo de vida, tu día a día y en la que apenas tienes tiempo para ti misma. La maternidad es el amor verdadero, es el amor más incondicional y generoso que existe.Un amor sin límites y desinteresado.

En los últimos años los avances médicos han permitido que las fronteras de la maternidad se alteren significativamente con las técnicas de reproducción asistida y la maternidad subrogada o, más conocida, como vientre de alquiler. Aunque en España está totalmente prohibida, cada vez son más las parejas que acuden a este método para conseguir ser padres, viajando a países en los que sí está permitido.

Es importante recordar que la maternidad es, sobre todo, un sentimiento vocacional. Para tener un hijo es necesario desearlo. Sólo con amor y teniendo muchas ganas de formar una familia se superan las horas sin dormir, la falta de tiempo en pareja, las preocupaciones de por vida y, en definitiva, todos los cambios que se producen con la maternidad.

El primer cambio sucede cuando llegas a casa por primera vez con tu bebé. Es normal sentirse a veces desorientada y tener sentimientos contradictorios que, en ocasiones, te desbordan, aunque no todas las mujeres lo cuentan. La mayoría de ellas entran en contacto con la maternidad ya siendo adultas y sin muchas experiencias previas. Algunas cogen por primera vez un bebé en sus brazos cuando dan a luz y, aunque existen los cursos de preparación del parto, nadie te prepara para lo que pasa cuando sales del hospital. Ahí comienza el verdadero significado de la maternidad.

El principal cambio que se produce con la llegada de un bebé a la familia sucede en la pareja. No sólo el tiempo de dedicación ya no a las relaciones sexuales, sino simplemente a poder mantener una conversación es apenas inexistente, sino que, normalmente, a los pocos días del parto, el padre vuelve a su rutina laboral y es la madre quien se encarga de los cuidados del bebé durante las 24 horas del día y la noche. Durante esta época muchas mujeres pueden sentirse solas, perdidas o desorientadas. A veces se comparan con sus parejas, y sienten que tienen más mérito que ellas pues están ganando dinero fuera de casa.

Si antes de tener al bebé, trabajabas fuera de casa, es difícil adaptarse a pasar muchas horas en casa con tu hijo a un ritmo muy diferente al acostumbrado, y, a veces, con la sensación de no haber hecho nada especial ese día. Esto sucede porque, aunque parezca mentira hoy en día, seguimos viviendo en una sociedad en la que ser madre no está valorado, ni mucho menos, todo el esfuerzo que supone. Pero la realidad es que el significado de maternidad está muy por encima de todo esto y, aunque cada mujer la viva de una manera diferente, atender y cuidar de tu bebé es una gran experiencia de la que hay que disfrutar.

Los momentos más difíciles pasan transcurridos unos meses. Después de haber sentido momentos de soledad, pánico, confusión o incertidumbre, las mamás comienzan a entender mejor a su bebé, a comprender qué le pasa cuando llora o cuándo tiene hambre. Para algunas mujeres es importante sentirse cerca de otras mujeres que estén viviendo la misma experiencia. Poder compartir vivencias, sentimientos o conocer a otras personas que estén pasando por lo mismo que tú puede ayudarte a sentir menos dudas y temores.

Por otro lado, para poder disfrutar al máximo del significado de la maternidad, es indispensable el apoyo de la pareja, no sólo en lo que a los cuidados del bebé y las responsabilidades se refiere, sino también en el aspecto emocional. Sentir que tu pareja te acompaña en todo el proceso de crianza y que está ahí cuando la necesitas sólo suma a tu felicidad. Tener una buena comunicación y hablar sobre los diferentes sentimientos que tenéis de inseguridad, confusión, miedo, ansiedad, preocupación… es muy importante para que los días en los que las horas de cansancio o la falta de sueño hagan mella en vuestro humor, vuestra relación no se resienta. 

La maternidad marca un antes y un después en tu vida y, especialmente en la de la pareja y, aunque ya nada volverá a ser lo que era, es una experiencia tan gratificante que la falta de cansancio, las horas sin dormir, las noches de fiebre, las rabietas y, en definitiva, todos los momentos difíciles e inconvenientes, no importan cuando ves que tu hijo crece feliz. Es en ese momento cuando te das cuenta de que merece la pena.