Sadie Robertson cuenta que su hija se quedó atascada en un parto aterrador

Sadie Robertson cuenta que su hija se quedó atascada en un parto

Dos meses después de la llegada de su primogénito, Sadie Roberston relata su angustiosa experiencia al dar a luz a su hija, Honey James.

La estrella de "Duck Dynasty", de 24 años, habló sobre el "caótico" parto en su podcast, WHOA That's Good. Después de planear inicialmente un parto sin medicación, Robertson dijo que "no ocurrió nada de lo que había planeado, pero ocurrió todo lo que había rezado".

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"Así que voy a empujar y todo se vuelve una locura", recuerda Robertson. "De repente, me empujaron hacia la cama y apartaron a mi madre, y todas las enfermeras de la habitación estaban encima de mí y me tiraban de las piernas y me empujaban el estómago tan fuerte como podían y, sinceramente, no sabía qué había pasado. Creí que me habían abierto por lo doloroso que era cuando me presionaban el estómago. Ahora sé que estaban presionando mi hueso pélvico para sacarla porque lo que pasó fue que Honey se quedó atascada".

A continuación, Roberston explicó que el hombro de Honey se atascó en el canal de parto y le impidió salir.

"Así que su hombro se quedó atascado, lo que es muy, muy raro", añadió. "Desde entonces, descubrimos que eso sólo ocurre en un 1% de los partos, y es lo que nuestra enfermera dijo que es lo más aterrador que puede ocurrir en un parto vaginal....

"El tiempo se quedó parado.... El hombro pinzaba el cordón umbilical, haciendo que no recibiera aire".

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Robertson dijo que su médico intentó frenéticamente romper el hombro de Honey para sacarla.

"Cada segundo cuenta, y no pudieron sacarla durante dos minutos y 10 segundos", dijo. "Así que, esto realmente fue muy aterrador y muy peligroso. Por suerte, no sabía lo que estaba pasando. Sabía que algo iba mal por el dolor y el médico me acababa de decir: 'El siguiente empujón, ya está aquí'. Así que lo que normalmente tarda entre tres y cinco segundos, tardó dos minutos y diez segundos. Entonces se le atascó la rodilla después de que le sacaran el hombro".

Después de que Honey finalmente emergiera, el calvario de la familia no había terminado. Honey no respiraba.

"Tenía la cara morada y el cuerpo blanco", recuerda Robertson. "Daba mucho miedo".

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Durante el parto, Robertson puso música cristiana en la habitación del hospital, y la canción "Million Little Miracles", de Elevation Worship, estaba sonando cuando Honey por fin logró salir. Esta era la canción que Robertson y su marido querían que sonara durante su llegada. La pareja dice que fue una milagrosa coincidencia que estuviera sonando en el momento exacto en que nació.

"Y así, en el momento en que me la quitan a la mesa y tratan de que respire, sólo escucho eso", dijo. "Me pusieron a sonar 'Million Little Miracles' y, de repente, oímos la oración que rezamos, el león de la tribu de Judá. El rugido, por así decirlo. Literalmente, gritó, y fue un milagro porque las enfermeras dijeron que no debería haber respirado por sí misma. Estaban a punto de llevarla a la UCIN y empezó a respirar por sí misma, le dieron un poco de oxígeno que tenían allí y lo hizo por sí sola".

Los médicos y las enfermeras también se asombraron de que, a pesar de intentar romper el hombro de Honey para sacarla rápidamente, su hombro saliera ileso del proceso.

"Hicieron que tres médicos le revisaran el hombro porque no podían creer que no se hubiera roto", dijo Robertson.

Robertson señaló que ella y su marido, Christian Huff, eligieron el nombre de Honey porque Honey es dulce y fuerte a la vez. Dijo que el nacimiento de Honey demuestra que su hija es esto último.

"Era tan fuerte".