Los mejores juguetes para niños menores de tres años

Los mejores juguetes para niños menores de tres años

Aunque muchas veces no nos damos cuenta, cuando se trata de los peques, los mejores juguetes son los objetos cotidianos. Cualquier utensilio como una caja, un bote, una lata, una cuchara, o incluso una etiqueta, es lo que más les divierte cuando los niños son menores de tres años.

Pero si se trata de comprar juguetes nuevos, lo más importante a esta edad es tener en cuenta la seguridad. Por eso es de vital importancia leer la información que los fabricantes incluyen y las instrucciones. Además de ser juguetes homologados, también tienen que ser aptos para la edad de tu pequeño. Sólo de esta manera evitarás peligros mayores y conseguirás sacar el máximo provecho a juguetes que compres.

Los mejores juguetes para niños menores de tres años son aquellos que no contienen piezas pequeñas o desmontables que pueden ser ingeridas porque existe riesgo de atragantamiento. Se recomiendan los juguetes con diferentes texturas, formas y colores para que puedan manipular y explorar y, de esta manera, estimular todos sus sentidos.

Te indicamos algunos ejemplos que pueden servirte de ayuda:

De 0 a 6 meses: sonajeros, móviles de cuna, mordedores, espejos y alfombras o mantas de juego y actividades resultan ideales para esta edad.

De 6 a 12 meses: pelotas de distintos tamaños, libros de texturas o cuentos sonoros, muñecos de trapo…

A partir del año: puzles, rompecabezas, piezas encajables… les ayudará a desarrollar la psicomotricidad fina, la coordinación ojo-mano, la atención, la concentración o la organización espacial.

A partir de los 18 meses: cubos para encajar, telas, triciclos, juguetes de arrastre, instrumentos musicales, juegos de encajar piezas…

De dos a tres años: comienzan la etapa del juego simbólico por eso todo lo que implique imitar situaciones cotidianas les encanta: jugar a las cocinitas, teléfonos de juguete, plastilina, peluches, muñecas…

En esta última etapa los mejores juguetes son aquellos que les ayudan a ponerse en el lugar del otro. Se desarrolla aún más su creatividad e imaginación así que les encantará convertirse en superhéroes, profesores, cocineros o papás.

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