Cinco cosas del embarazo que son completamente normales

Desde el momento en que se produce la concepción ocurren muchas cosas en tu cuerpo: tus hormonas están de fiesta y tu cuerpo es el lugar de celebración, así que no es de extrañar que sientas algunas sensaciones extrañas (y maravillosas) mientras crece tu bebé. Así que aquí tienes nuestra lista de cinco cosas del embarazo que son completamente normales.

Calambres en las piernas

Aunque no son tan maravillosos, son completamente normales en el embarazo. Los calambres en las piernas pueden deberse a un aumento de la circulación, a un aumento de peso o a una carencia de minerales. Pueden aparecer de forma repentina y también pueden despertarte por la noche. Su aparición repentina puede ser alarmante, pero aparte de ser dolorosa en ese momento, no te causará ningún daño a ti ni a tu bebé. Hacer algunos estiramientos suaves con regularidad puede ayudar, llevar zapatos de tacón bajo y dar paseos regulares también puede ayudar. Si persisten, habla con tu médico.

Dolor de ligamentos redondos

El dolor del ligamento redondo puede ser bastante alarmante porque puede parecer un dolor de regla. Esto puede causar pánico en algunas mujeres, especialmente en aquellas que han sufrido un aborto espontáneo. Sin embargo, el dolor del ligamento redondo es completamente normal y es el resultado del crecimiento del bebé y del estiramiento del útero para acomodarlo. El dolor no suele durar y cambiar de posición suele ayudar. Dormir con una almohada entre las piernas puede servir de apoyo durante la noche.

Los despertares nocturnos son normales en el desarrollo del bebé

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Alteraciones del sueño e insomnio

Las interrupciones del sueño son muy comunes en el embarazo y podría decirse que te estás entrenando para cuando llegue el bebé. Las micciones nocturnas más frecuentes suelen ser las primeras en producirse, pero a medida que el vientre crece, encontrar una posición cómoda se convierte en un reto. Las hormonas también pueden influir. Invertir en una buena almohada para el cuerpo te ayudará a encontrar una posición cómoda. Prueba a darte un baño caliente antes de acostarte con un poco de aceite de lavanda. Hacer ejercicio suave con regularidad también contribuye a la calidad del sueño. Evite el café por las tardes y trate de no beber demasiada agua por la noche.

Cambios en la pigmentación de la piel

Este es uno de los efectos secundarios más felices (pero extraños) del embarazo. Conocido como "cloasma" o "máscara del embarazo", está causado por el aumento de los niveles de estrógeno y puede aparecer en forma de manchas en la cara y como la línea oscura que va de la parte superior a la inferior del vientre de algunas mujeres. Puede hacer que las pecas o los lunares adquieran un tono más oscuro, y es responsable del oscurecimiento de la areola. Si te molesta, usa protector solar a diario e intenta mantenerte alejada de la luz solar directa. Sin embargo, como está relacionado con las hormonas, es probable que no desaparezca por completo hasta después del parto o cuando hayas terminado de dar el pecho.

Cabello grueso y brillante

Otro efecto secundario positivo del embarazo es un cabello grueso, sano y brillante. Esta vez las hormonas del embarazo están de tu lado y el resultado es que dejas de perder pelo al mismo ritmo que antes del embarazo. Algunas mujeres afortunadas experimentan más cuerpo o más rizos en su cabello durante el embarazo. Lamentablemente, esto es sólo temporal y después del parto o cuando hayas terminado de dar el pecho experimentarás un aumento de la caída del cabello mientras se estabiliza. No te alarmes si sientes que pierdes una gran cantidad de pelo después del parto; como no te has desprendido de mucho durante el embarazo, tendrás mucho de qué desprenderte.