Rutina de cuidado de la piel del bebé en 3 sencillos pasos

La clave para el cuidado de la piel sensible del bebé es que sea suave, sin complicaciones y eficaz. Su piel es más fina y frágil, por lo que es naturalmente propensa a la irritación, las erupciones y la sequedad.

Por eso es importante no sólo limpiar su preciosa piel, sino protegerla, nutrirla, calmarla, hidratarla y curarla.

Aunque pueda parecer que hay más pasos que seguir que en tu propia rutina de cuidado de la piel, en realidad no tiene por qué ser complicado. A continuación te explicamos cómo cuidar la piel de tu precioso bebé en tres sencillos pasos para mantenerla sana y feliz.

Rutina de cuidado de la piel del bebé en 3 sencillos pasos

Una rutina de cuidado de la piel del bebé es tan sencilla como lavar, proteger e hidratar. A continuación te explicamos cómo hacerlo con más detalle, además de los productos e ingredientes que debes buscar y evitar:

1. Lavar suavemente sin irritar

Los bebés no necesitan un baño todos los días, así que hazlo sólo cuando creas que tu pequeño lo requiere. Puede que pienses que muchas burbujas en la bañera equivalen a limpieza, pero muchos jabones de burbujas o lavados pueden resecar e irritar la piel y el cuero cabelludo del bebé debido a los detergentes sintéticos fuertes añadidos (como el sulfato de sodio y laureth).

Esto no significa que tengan que perderse por completo la diversión de las burbujas. Solo tienes que buscar un lavado suave que contenga limpiadores de origen natural e ingredientes que calmen la piel.

Sécalos suavemente con una toalla suave, prestando atención a los pliegues de la piel. No se recomiendan los polvos de talco.

2. Proteger con una crema barrera

Después del baño y de cada cambio de pañal, utiliza una crema barrera calmante para proteger la piel de la zona del pañal de la sequedad y las erupciones.

Un bálsamo que utilice Zinc natural como base es ideal, además querrás añadir algunos aceites nutritivos y sin frutos secos (para tener la tranquilidad de que no hay alergias a los frutos secos) e ingredientes calmantes para tratar la causa de la irritación en lugar de sólo protegerla.

Deja que tu bebé pase un tiempo sin pañales para que la zona se seque al aire y se minimice la dermatitis del pañal.

3. Hidratar, suavizar, curar y calmar

Por último, es fundamental nutrir e hidratar la piel del bebé con una buena crema hidratante sin perfume, diseñada para cuidar su delicada piel. Lo ideal es que una crema calmante incluya aceites naturales, como el aceite de onagra, y esté llena de ingredientes curativos, como la alantoína y el aloe vera.

Aplica una crema hidratante a los primeros signos de sequedad. Si la piel sigue enrojecida e irritada, es posible que se trate de un eczema, así que habla con tu médico sobre el tratamiento.

Recuerda también proteger la piel de tu bebé del sol. Los bebés menores de 6 meses deben evitar la exposición directa al sol, y los mayores deben aplicarse protector solar entre 15 y 20 minutos antes de salir al exterior cuando el índice de rayos UV sea igual o superior a tres.

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