¿Por qué mienten los niños?

Es muy frustrante cuando alguien nos miente, ¡especialmente los niños! Todos hemos visto a un hermano dar un puñetazo a su hermana y luego negarlo rotundamente aunque lo hayamos presenciado, o a un adolescente decir que no se quedó hasta tarde aunque tú estabas levantado cuando llegó a casa. Para muchos padres es como si sus hijos les mintieran todo el tiempo. Si usted adopta una política firme de no mentir en su casa, puede crear un entorno en el que su hijo se sienta seguro para compartir la verdad.

Entonces, ¿por qué mienten los niños?

"Los niños dirán una mentira cada vez que piensen que decir la verdad les traerá sentimientos realmente aterradores de 'mis padres están muy enojados conmigo', 'mis padres me están castigando', 'mis padres me están mirando de una manera que me hace sentir inseguro', 'mis padres están súper decepcionados conmigo' o 'me voy a meter en problemas'", dice la doctora Becky Kennedy, psicóloga clínica y fundadora de Good Inside, quien recientemente publicó una serie de historias en su popular página de Instagram discutiendo este mismo tema.

 Continúa explicando que los niños no están tratando de manipular a sus padres para evitar meterse en problemas, sino que es un mecanismo evolutivo de apego. "Permanecer cerca de los padres garantiza la supervivencia biológica y la seguridad psicológica, ambas necesarias para que un niño crezca y prospere. Desde un punto de vista evolutivo, nuestros hijos necesitan sentirse seguros con nosotros, lo que significa que necesitan sentir que los queremos cerca y que los queremos", dice el Dr. Kennedy.

Según la doctora Kennedy, si un niño siente que decir la verdad le hará sentirse solo, avergonzado o llenará a sus padres de cualquier emoción negativa, no es que elija mentir, sino que se verá obligado a hacerlo para preservar la conexión con sus padres.

¿Su solución?

Hacer todo lo posible por crear un entorno en el que su hijo sienta que usted reaccionará a la verdad con preocupación y comprensión y será más probable que sea honesto. Obviamente, esto es difícil de hacer cuando tu hijo acaba de hacer algo exasperante, pero pensar en el panorama general probablemente mejorará la situación a largo plazo.

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