14 cosas que desearía haber sabido antes de dar a luz

La experiencia del parto no siempre es como uno espera. He dado a luz a cinco bebés, incluidos gemelos, y he tenido una cesárea de urgencia. También he asistido a miles de partos como enfermera matrona. Cada parto ha sido diferente. He hecho una lista de cosas que me hubiera gustado saber cuando di a luz a mis dos hijos mayores antes de ser enfermera. También he incluido cosas que mis pacientes me han dicho que desearían haber sabido para prepararse mejor.

Cosas que desearía haber sabido

antes de mi parto

Aquí tienes 14 cosas que desearía haber sabido antes de mi parto y cosas que otras mujeres dicen que desearían haber sabido antes del suyo.

1. Bolsa de hospital

¡Se llama bolsa de hospital porque no es una maleta! No hace falta que te lleves la mitad del armario, el centro de entretenimiento o los electrodomésticos de la cocina. Muchas embarazadas llevan demasiadas cosas al hospital. Recuerda que debes trasladar tus pertenencias desde el triaje hasta la sala de partos y de nuevo al posparto.

Una lista de comprobación puede ayudarte a determinar qué llevar en la maleta para el parto. Lleva la bolsa al hospital sólo cuando sepas que te han ingresado. Tu persona de apoyo puede cogerla por ti.

2. Falso parto

Puede que acudas al hospital para el parto y te manden a casa. Ocurre a menudo. Las falsas contracciones de parto llamadas Braxton Hicks pueden confundirse con trabajo de parto.2 Algunas mujeres pueden visitar el hospital varias veces antes de ser ingresadas. También es posible que te envíen a casa si tus contracciones son de parto, pero todavía es muy pronto.

Las contracciones reales del parto tienen las siguientes características:1,2

    Ven a intervalos regulares

    Cada vez más cerca

    Últimos 60-90 segundos

    Continúa incluso cuando descansas o cambias de posición

    Hazte más fuerte con cada uno

    El dolor suele comenzar en la espalda y se desplaza hacia delante

    A menudo hay una secreción mucosa sanguinolenta llamada show sangriento

3. Planes de parto

Los planes de parto deben cambiarse por preferencias de parto. Es imposible planificar el parto. Pueden ocurrir muchas cosas. Sólo sabrás lo que quieres durante el parto cuando lo estés experimentando.

Es estupendo tener ideas sobre cómo le gustaría dar a luz en una situación perfecta. Escribir sus ideas le ayuda a organizar y comunicar sus deseos a su pareja y al equipo sanitario. Los estudios han demostrado que las mujeres tienen experiencias de parto más positivas cuando tienen un plan de parto.3,4

Sin embargo, tenga en cuenta que no puede planificar cosas como:

    Cómo tolera el bebé el parto

    Si está agotada o enferma cuando se ponga de parto

    Trabajo de espalda

    Parto prodrómico

    Inducción del parto

    Complicaciones

Lo más importante para planificar es que surjan imprevistos. El objetivo principal de cualquier plan debe ser tu seguridad y la de tu bebé.

4. Levántate de la cama

El parto es más fácil si puedes levantarte y moverte. Levantarse de la cama puede ayudarle a tener:5

    Trabajo más rápido

    Mayor comodidad

    Mayor probabilidad de parto vaginal

    Mayor sensación de control

    Menor necesidad de analgésicos

5. Métete en el agua

Uno de los mejores lugares fuera de la cama para dar a luz es la ducha o la bañera. Estar en el agua tiene muchas ventajas, entre ellas:6

    Menor necesidad de analgésicos

    Favorece la relajación

    Aumento de la energía

    Contracciones más eficaces

    Mejora de la circulación sanguínea

    Disminución de la ansiedad

    Reducción de las hormonas relacionadas con el estrés

Muchas mujeres no quieren moverse una vez en la cama. Pero se sienten mucho más cómodas cuando están de pie, sobre todo en el agua. En repetidas ocasiones he visto cómo un parto estancado se aceleraba con el movimiento y el tiempo en el agua.

6. Apoyo

Necesitarás apoyo, pero posiblemente no como pensabas. Quizá hayas ido a clases de preparación al parto con tu pareja y hayas leído sobre cómo sobrellevar los dolores del parto. Puede que te imagines que quieres masajes y masajes en los pies. Luego llegan las contracciones y no quieres que nadie te toque.

Habla con tu pareja sobre cómo puede apoyarte durante el parto y prepárate para diversas técnicas de apoyo. Si tienes muchas opciones, encontrarás lo que te funciona cuando llegue el momento.

7. Tu cuerpo está al mando

Durante el parto, tu cuerpo está al mando. No puedes detener ni pausar las contracciones. Las diferentes sensaciones que experimenta pueden ser nuevas y abrumadoras. A veces, puede sentirse fuera de control.

Cuando tuve a mi primer bebé, imaginé estar tranquila y concentrada. Acabé gritando a mi bebé. El parto fue muy rápido. Sentí que ni siquiera me daba tiempo a pensar en cómo sobrellevarlo antes de que empezara la siguiente oleada. Después de que naciera mi hija, recuerdo que pensé: "¡Espera! Ni siquiera tuve la oportunidad de hacer mis técnicas de respiración".

8. Empujar

Empujar suele ser un trabajo duro. En algún momento del parto, la mayoría de las mujeres dirán: "¡No puedo hacerlo! Pero, de algún modo, lo hará. Te esforzarás y encontrarás la fuerza y el valor necesarios para empujar al bebé.

La fase de los pujos puede ser larga. Es normal pujar hasta tres horas con el primer bebé y hasta dos horas cuando ya se ha tenido un bebé antes.14 Sin embargo, normalmente se tarda mucho menos.

Incluso con epidural, las ganas de empujar suelen ser intensas. Pero algunas mujeres no sienten ese impulso y deben aprender a aguantar. He oído a muchas mujeres decir que fue un alivio poder empujar después de pasar por el parto. Por fin podían hacer algo con las contracciones.

9. Posiciones para el parto

La posición tradicional para empujar es boca arriba con las piernas echadas hacia atrás. Aunque esta posición funciona para muchas mujeres, puede haber mejores opciones para su experiencia de parto. Hable con su equipo médico y pruebe distintas posturas.

Cualquier posición en la que estés erguido permitirá que la gravedad te ayude. En posición vertical, la pelvis tiene más espacio para abrirse. En cuclillas, la parte inferior de la pelvis tiene un 20% más de espacio. Las contracciones son más fuertes y eficaces, y a las mujeres les suele resultar más cómodo estar erguidas.7

Otras posturas beneficiosas son la posición tumbada de lado y la de manos y rodillas. La posición tumbada de lado puede reducir el riesgo de desgarro y hacer que te sientas más cómoda. Las manos y las rodillas permiten que la pelvis se abra en todas las direcciones y pueden reducir los desgarros.7

10. El parto no es como en la tele

El parto no dura 30 minutos como en la tele. A menudo hay horas de espera o de trabajo durante las contracciones. El primer parto dura de media entre 12 y 24 horas, desde las primeras contracciones leves hasta tener al bebé en brazos.9

El parto suele ser complicado. Es normal perder hasta 500 ml de sangre en un parto vaginal.8 Esto equivale a unos 2 vasos de sangre. También puede haber líquido amniótico, pis, caca, sudor y vómito.

El parto suele ser ruidoso. Las mujeres hacen varios ruidos durante el parto, desde gemidos hasta gruñidos y gritos.

11. Extracción de la placenta

Por fin tienes a tu bebé en brazos. Lloras de felicidad porque has terminado el parto. Pero, ¡espera! Aún no ha terminado. Todavía tienes que expulsar la placenta. Es normal que tarde hasta 30-60 minutos después de un parto vaginal.10 A menudo sale a los pocos minutos.

Afortunadamente, la placenta es blanda, no como la cabeza del bebé. Puede que empujes una o dos veces para expulsarla, pero no es nada parecido a expulsar a tu bebé.

12. Puntadas y bolsas de hielo

Vale, por fin has terminado. No tan rápido. Entre el 53% y el 79% de los partos vaginales provocan algúndesgarro11. En mi experiencia con el parto, las reparaciones pueden durar desde tres o cuatro minutos hasta más de una hora.

La buena noticia es que tienes un nuevo bebé para abrazarte y distraerte. Tu médico o matrona te pondrán lo más cómoda posible con la epidural que ya tienes o inyectándote anestesia local.

Las bolsas de hielo para el perineo después del parto se convertirán en tus mejores amigas. El uso de bolsas de hielo disminuye el dolor y la inflamación.13

13. Masaje u terino

Atención. El masaje uterino o del fondo uterino no tiene nada de reconfortante ni relajante.

Como parte de su experiencia en el parto, su enfermera comprobará con frecuencia que su útero está firme después del nacimiento. Estos controles se realizan masajeando el útero a través del abdomen. Masajear el útero ayuda a contraerlo y a reducir la hemorragia.12 Todo esto suena muy bien, pero no es cómodo. Puede ser bastante desagradable.

Lo mejor es relajarse y respirar lenta y profundamente. Si se resiste, el proceso durará más tiempo y será más incómodo.

14. Sus enfermeras

Sus enfermeras de trabajo de parto y parto serán sus mayores animadoras, educadoras, apoyadoras y consoladoras. La mayoría de los padres se sorprenden de lo mucho que hacen por ellos.

Si aprecias a tus enfermeras, regálales una nota de agradecimiento, golosinas u otra muestra de aprecio. Las enfermeras aprecian mucho las tarjetas de agradecimiento. Conozco a muchas enfermeras que las guardan todas para siempre.

Cada experiencia laboral es diferente. Pase lo que pase, habrá sorpresas. Probablemente habrá incluso más de las que pueda contar una lista, pero sé flexible y ten claro que puedes hacer frente a todo lo que se te presente.

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